Piloto

En un vehículo, los pilotos luminosos, también conocidos como testigos, son pictogramas de colores situados en el panel detrás del volante que avisan, por lo general, al conductor de cualquier problema o avería que suceda en el mecanismo del vehículo.

Los tamaños, diseños y formas de estos, dependen del modelo, fabricante y antigüedad del vehículo, pero existe un amplio consenso en cuanto a estos pilotos luminosos del panel de instrumentación. No existe un número exacto de estos indicadores pero un coche moderno podría contar con un centenar de pilotos luminosos en el panel.

Al arrancar el vehículo, cada uno de los sistemas a los que pertenece cada piloto luminoso realiza una comprobación para ver si todo está funcionando correctamente, si es el caso, se envía un mensaje indicando a la instrumentación que se pueden apagar.

Para indicar el nivel de peligrosidad que supone la avería o problema en cuestión, los pilotos luminosos se pueden clasificar en tres colores:

• Piloto rojo: Avisan de una avería grave, se deberá detener el vehículo lo antes posible y de manera segura. Inmediatamente después, se deberá avisar a las asistencias.

• Piloto amarillo: Pueden ser también de color ámbar, avisan de un fallo en algún sistema del vehículo pero que no implique detener el automóvil. Aunque se deberá parar y solicitar la ayuda de un profesional lo antes posible.

• Piloto verde: Pueden ser de otros colores, pero nunca serán rojos o amarillos. Estos tan solo informan al conductor, no indican ninguna avería en el vehículo y por lo tanto no implican detener el automóvil ni avisar a las asistencias.