Garaje
Significado de garaje
El término garaje puede emplearse para designar realidades diferentes, aunque todas ellas están vinculadas a la función de guardar un automóvil.
Así, un garaje residencial es aquel que se integra en una vivienda como espacio reservado a los vehículos de los residentes. Ese espacio puede formar parte de una vivienda unifamiliar o bien de un edificio sometido al régimen de propiedad horizontal. Se trata en este último caso de un garaje común para todos los vecinos, que suelen tener asignada una plaza concreta para estacionar su automóvil.
Por otro lado, un garaje comercial es un establecimiento en el que los usuarios pueden dejar su vehículo pagando un precio en función del tiempo de ocupación de la plaza.
Un tercer y último uso del término se da como equivalente de taller mecánico, es decir, referido a un local profesional dedicado a la reparación de vehículos.
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El origen del garaje
La aparición de los garajes es casi simultánea a la del automóvil. Para guardar y proteger los vehículos se emplearon en un principio las antiguas cocheras o caballerizas, pero dado que solo las viviendas lujosas contaban con esos espacios, se hicieron necesarios los primeros garajes comerciales ya a comienzos del siglo pasado.
Con la producción de vehículos a gran escala, apoyada por numerosas campañas publicitarias, y la popularización de los automóviles, los garajes residenciales se generalizaron en las viviendas unifamiliares de nueva construcción. También proliferaron en entornos urbanos los comerciales, que con rampas y elevadores encontraron soluciones a la circulación de los coches por el interior de la estructura.
