Llave dinamométrica
Significad de Llave dinamométrica
La llave dinamométrica recibe también el nombre de llave de torsión o de torquímetro. Consiste en una herramienta que se utiliza de forma manual y que sirve para apretar elementos que necesitan ser enroscados.
En talleres de automóviles, la llave dinamométrica sirve sobre todo para dar a los tornillos el torque que recomienda el fabricante.
Únete a la revolución del seguro de coche Hello Auto y empieza a disfrutar de las ventajas del seguro más digital del mercado.
Ventajas de la llave dinamométrica
El uso de llave dinamométrica en talleres de automóviles se debe a que, con su utilización, se evitan sobretensiones y deformaciones de aquellas piezas que están enroscadas.
La llave dinamométrica ofrece el torque apropiado con máxima precisión o con toda la fuerza que sea requerida, con el fin de contar con la máxima sujeción posible de las piezas.
Su extensión en el mercado automovilístico ha motivado el desarrollo de múltiples variantes de esta herramienta, con el fin de poder adaptarse a todas las necesidades.
Tipos de llave dinamométrica
La llave dinamométrica puede presentar varios tipos, en función del acabado final que tenga o de los componentes adicionales que incorpore. Estas son algunas de las tipologías más conocidas:
En primer lugar tenemos la llave dinamométrica digital, que funciona con una pantalla en la que se muestra información recabada gracias a su circuito electrónico interno.
Suele tener un aviso por sonido y también con vibración, que se activan cuando se ha alcanzado el nivel de sujeción que se ha configurado con anterioridad. Además, suele tener la posibilidad de medir en diferentes unidades.
En segundo lugar podemos encontrar la llave dinamométrica con reloj, que ofrece información analógica con una aguja que identifica el nivel de presión que se está realizando.
Por otro lado tenemos la llave dinamométrica de salto. Esta tipología cuenta con un sistema mecánico que se puede regular, con el que liberamos la tensión de la llave, al alcanzar el nivel de presión requerido. Es una llave muy útil, cuando tenemos que apretar elementos de una forma repetitiva o continuada, como sucede en las cadenas de montaje.
Por último, cabe destacar la llave dinamométrica de control, con un sensor de torque al que podemos configurar un límite para no pasarnos a la hora de apretar.