Picado

El picado, también conocido como detonación, es un fenómeno que tiene lugar en los motores, concretamente en el interior de los pistones, debido a que se produce la combustión demasiado pronto, provocando que el pistón se vuelva a desplazar, sin que haya realizado su desplazamiento completo, por la expansión. 

Este fenómeno hace sufrir mucho al conjunto del motor, sobre todo a la biela y al cigüeñal, y puede producir daños muy graves a toda la mecánica del vehículo.

El picado, al igual que la combustión normal, se produce en un intervalo de tiempo muy pequeño, pero la combustión correcta y normal ocurre de manera suave y gradual, mientras que la detonación o picado lo hace de manera violenta.

Este fenómeno de picado puede estar causado por distintos motivos, el más común en los motores de gasolina es el ajuste incorrecto del punto de encendido, es decir, la chispa en la cámara de combustión se produce antes de tiempo, lo que provoca la expansión temprana del pistón.

Un combustible de mala calidad o con un octanaje por debajo de lo especificado también puede provocar este fenómeno de picado en los motores. Un combustible de mala calidad puede explotar antes de que se produzca la chispa, por eso los motores cuando detectan que se está produciendo el picado, enriquecen la mezcla de aire y combustible, lo que provoca una disminución de la temperatura y no permite que se encienda. Una mezcla en la cámara de combustión pobre también provoca picado de biela porque aumenta demasiado la temperatura.

En el caso de los motores que funcionan diésel, el picado ocurre debido a que los inyectores están desgastados o tienen algún defecto, y producen problemas de presión a la hora de inyectar el combustible.