Wallbox
Significado de wallbox
Hace referencia al punto de recarga físico que se instala en las paredes para proveer de corriente eléctrica a los vehículos eléctricos, permitiendo su recarga mediante un cable. El término proviene de las palabras en inglés pared (wall) y caja (box) debido a su similitud con una caja fijada en la pared.
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Características de un wallbox
Gracias a la electrónica de carga con la que cuenta un Wallbox, este se puede comunicar con el vehículo eléctrico para la recarga de sus baterías y se puede utilizar tanto en instalaciones eléctricas monofásicas como trifásicas.
Un Wallbox, protege frente a descargas eléctricas y ayuda a evitar picos de tensión mientras se realiza la carga del vehículo, protegiendo las baterías de los coches eléctricos.
Además, en su gran mayoría, realizan medidas de la energía que se está consumiendo en todo momento, función con mucha utilidad para poder llevar un control a la hora del pago de la factura de la electricidad y en el caso de haber sido instalado en un aparcamiento comunitario.
Otra de las características más importantes y útiles de un Wallbox es que se pueden programar para que realicen los procesos de recarga cuando las tarifas sean más baratas, ayudando al ahorro.
Por último, los Wallbox nos permiten hacer un uso en el momento preciso y sin miedo a que personas ajenas a la instalación, o que no sean los propietarios, puedan acceder a su uso.
Requisitos para la instalación de un wallbox
Se recomienda que al instalar un punto de recarga Wallbox se cumplan una serie de requisitos, entre ellos, que la potencia mínima que haya contratada sea de 4,6 kW, ya que con potencias inferiores no se consigue un uso eficiente.
Otro punto importante a la hora de instalar un Wallbox, si se tiene que hacer en una comunidad de vecinos, es comunicar al presidente, o al administrador en su caso, la intención de instalarlo.
Tipos de wallbox
Los Wallbox se pueden clasificar en dos categorías:
- Plug & Charge: Es decir, enchufar y cargar, estos modelos son los más sencillos del mercado. Se caracterizan por su bajo coste y una alta efectividad. El sistema se pone en marcha al instante de conectarlo al coche eléctrico.
- Cargadores inteligentes: Ofrecen soluciones para casos más específicos. En el caso de instalaciones con energía limitada o con generación fotovoltaica pueden contar con un sistema en el que el cargador equilibra la energía total con la consumida en ese momento. La energía que queda disponible es la que se dirige a la carga del vehículo.