GT
Significado de GT
Los GT, o Gran Turismo, son un tipo de vehículos deportivos diseñados con unas altas prestaciones y rendimiento. El formato más común es con el motor situado en la parte delantera y tracción trasera, con dos puertas y con 2 ó 4 plazas.
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Origen detrás de las siglas GT
La comercialización de vehículos GT se originó en Europa, a principios de la década de 1950, con el primer modelo que presentaba estas características en el año 1951 por parte de la marca italiana Lancia.
Sin embargo, el origen de las siglas GT se puede remontar al siglo XVII, con la realización de los Grand Tours por parte de jóvenes de la alta sociedad, generalmente británica, en los que recorrían grandes distancias en busca de las raíces de la cultura europea del este.
Algunas marcas italianas como Alfa Romeo, Ferrari o Lancia, se inspiraron en estos largos viajes para empezar a utilizar el término GT en sus modelos de mitad del siglo XX. Buscaban desarrollar coches rápidos, ágiles, cómodos y espaciosos que cumplieran con las características necesarias para este tipo de viajes largos.
El deporte de motor impulsó la evolución de este tipo de vehículos y con los años se trasladó el término GT a los coches de calle de hoy en día. En la actualidad son muchas las marcas que usan las siglas GT para simbolizar el modelo insignia, con más prestaciones, lujo y comodidades.
Características de un GT
Generalmente un GT es sinónimo de conducción rápida, con estilo, de seguridad y comodidad. Los GT suelen centrarse en la comodidad y una buena conducción, en cambio, los deportivos suelen ser vehículos más agresivos en comparación con la sofisticación de los gran turismos.
La gran mayoría de GTs equipan el motor en la parte delantera del vehículo y la tracción en las ruedas traseras, esto permite más espacio en la cabina que los diseñados con el motor en medio del vehículo. La suspensión suele ser más suave, tienen más espacio de carga y cuentan con elementos de lujo, estas características se suman a un diseño exterior atractivo.
Además de las electroválvulas, que son las que regulan la presión del freno en cada rueda abriéndose y cerrándose, y la centralita que es la que trabaja todos los datos obtenidos, existen también los sensores de giro en las ruedas y una unidad de mando que es donde se decide si se deben abrir o cerrar las electroválvulas.