Llanta

La llanta también denominada aro. Es una pieza generalmente circular y metálica, aunque su forma varía en relación al tipo y tamaño del vehículo. Se sitúa en el centro de la rueda, sobre la que se coloca un neumático y que va unida al eje del vehículo. Su función es sostener el neumático para que conserve la forma al rodar. Las llantas se utilizan en vehículos como automóviles, camiones, motocicletas, bicicletas, aviones…

Dependiendo del país llanta puede designar el exterior de caucho (neumático) o la parte interna metálica.

En muchos países de América Latina como México o Colombia el término llanta hace referencia al neumático, a la cubierta exterior o cubierta de goma (a diferencia con España). Y para referirse a la pieza central y metálica de una rueda utilizan el término rin (que proviene del inglés rim).

Las llantas parecen uno de los componentes más simples de un automóvil, pero los grandes fabricantes están en constante desarrollo e investigación, para conseguir los mejores componentes y diseños más eficientes y sofisticados.

Se pueden clasificar los distintos tipos de llantas según el tipo de material del que están hechos, la estética que tienen o según las dimensiones que tienen.

• Llantas de aluminio

Este tipo de llanta se caracteriza por ser una de las más ligeras del mercado actualmente. Tienen muy buen comportamiento en curva y un aumento del ahorro de combustible.

Otra de sus principales características es que descentralizan la pérdida de energía en forma de calor que se produce a la hora de la frenada. Esto beneficia tanto a las ruedas como al sistema de frenos.

• Llantas de magnesio

Estas llantas se utilizan principalmente en la alta competición. Tienen un coste de fabricación alto y es una pieza de alto rendimiento. Son consideradas como un artículo de lujo. Sus características principales son que ofrecen la mayor ligereza y resistencia respecto al resto de llantas.

• Llantas de aleación

Son las más comunes, y las más utilizadas para la mayoría de vehículos. Son llantas ligeras, que hacen que el comportamiento del coche se caracterice por  un mejor comportamiento en curva, mayor agarre y una mejora en la suspensión. Durante los últimos años, las llantas de aleación se usaban en vehículos de alta gama, pero actualmente casi la mayoría de los vehículos tienen este tipo de llantas. El material se basa en una aleación de aluminio y magnesio con níquel. Cuando se reduce la cantidad de níquel de la aleación de la mezcla, hace que sea más moldeable, lo que facilita el diseño de las llantas. Lo que ha dado como resultado diseños muy innovadores que parecen obras de arte.

• Llantas de acero

Antiguamente este tipo de llanta era la única opción para automóviles. Se caracterizaban por estar cubiertas de lo denominado por tapacubos, que aparte de la forma estética de tapar la llanta, su función también era la de impedir el ensuciamiento de las tuercas de sujeción. Sin embargo actualmente, son cada vez menos los vehículos que vienen con este tipo de llanta puesto que son las más pesadas, lo que hace que tengan un peor comportamiento en curva y mayor gasto de combustible. La mayoría de los fabricantes de vehículos sustituían la estética tan simple de las llantas de acero por tapacubos de diseño, para hacer la imitación de llantas de mayor calidad y diseño. Además, este tipo de llantas se ensucian con mayor facilidad, aunque también son más sencillas de limpiar. Son muy resistentes en invierno a la sal que se esparce para derretir la nieve. Por último, son muy económicas de producir.

• Llantas de varios radios.

Este tipo de llantas pueden estar fabricadas por dos o tres diferentes componentes. 

• Llantas  forjadas.

Algunas de las llantas más duras del mercado están fabricadas con la metodología del aluminio forjado.

• Tipos de llantas réplica del estilo OEM.

Son producidas con métodos denominados fundición por gravedad; que es mucho menos costoso que el método original.

Los modelos más recientes son cada vez de mayor tamaño, lo que se traduce en neumáticos de perfil más bajo. Las dimensiones más frecuentes son:

Llantas de 15, 16, 17, 18 y 19. Aunque hay llantas de más pulgadas que de 19, pero no suelen ser las más comunes. Éstas se suelen utilizar para vehículos todoterreno o superdeportivos.